
El Marco Macroeconómico Multianual (MMM), según normativa del Perú, se publica en agosto de cada año y debe revisarse máximo en su abril próximo. En el último día de este mes, el Gobierno peruano publicó el informe de actualización de proyecciones macroeconómicas 2025-2028.
Del documento se destaca una revisión del crecimiento de la economía peruana.
El Poder Ejecutivo había declarado firmemente -y en repetidas ocasiones- que proyectaban una expansión de la actividad de 4% para este año. Ahora, el panorama cambia y habla de “un rango”, aunque más se inclina hacia el límite inferior.
“Se prevé que el crecimiento económico de Perú se ubique entre 3.5% y 4.0% para 2025. Cabe señalar que, en línea con los riesgos internacionales identificados que podrían afectar el desempeño de la economía, se utiliza la proyección conservadora del PBI de 3.5% para este año”, subrayaron en su resumen ejecutivo.

Pese a sus propias proyecciones oficiales, el ministro de Economía y Finanzas, José Salardi, aún insistió -a través de una nota compartida por el MEF- que la economía peruana crecerá 4% en 2025, “sustentada en fundamentos macroeconómicos sólidos, política fiscal y monetaria responsable y el impulso de las inversiones público – privadas".
En qué se sustenta la proyección de crecimiento de Perú 2025
En la sustentación de la estimación está, por el lado del impulso, la implementación de una serie de medidas de “corto y largo plazo” que buscan dinamizar las inversiones.
En detalle, se refiere al desarrollo de una cartera de proyectos relevantes bajo diversas modalidades como las Asociaciones Público Privadas (APP), Obras por Impuestos (OxI) y proyectos priorizados.
A esto se suma el impacto de las medidas asociadas al “shock desregulatorio” que “permitirá movilizar recursos estratégicos, reducir los costos operativos para las empresas, atraer inversiones y generar empleo formal”.
Como se recuerda, este primer paquete contempla 402 medidas y, según mencionó el titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el horizonte para que estén implementadas en julio de este año, cuando se anuncie un segundo grupo de acciones.
De otro lado, entre los riesgos, figura el panorama internacional, la escalada de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, pero sobre todo el impacto de la incertidumbre.
“Esto incrementa el riesgo sobre la evolución del comercio global y, por ende, sobre la actividad económica mundial. La economía peruana, dada su apertura y sensibilidad a factores externos, no es ajena a estos riesgos, ya que, en los últimos 15 años, alrededor del 60% de la variabilidad de su crecimiento ha estado explicada por choques internacionales”, detallaron.